10 razones para dejar de usar tampones y toallitas femeninas

Si estás reconsiderando el uso de productos menstruales tradicionales como tampones y toallitas femeninas, tenés que saber algo: vas por buen camino. Sin ánimo de convencerte de nada y alentándote a que te informes y tomes tus propias decisiones, te contamos 10 razones clave para buscar alternativas más saludables para vos y para el planeta.

1. Impacto ambiental: contaminación plástica
La mayoría de los tampones y toallitas femeninas no son solo de algodón. Muchos de estos productos contienen plásticos que tardan hasta 500 años en degradarse en los vertederos. Se estima que una persona menstruante utiliza unos 11,000 productos menstruales a lo largo de su vida, lo que genera una gran cantidad de residuos plásticos.

2. Productos químicos en los tampones y toallitas
Los tampones y toallitas convencionales contienen productos químicos, como dioxinas y furanos, que son subproductos del proceso de blanqueo con cloro. Estas sustancias han sido relacionadas con problemas de salud, como trastornos hormonales y algunos tipos de cáncer. Además, la exposición prolongada a estos productos químicos puede afectar el sistema inmunológico.

3. Riesgo de síndrome de shock tóxico (SST)
El uso prolongado de tampones aumenta el riesgo de desarrollar el síndrome de shock tóxico (SST), una infección bacteriana rara pero grave. El SST ha sido asociado con el uso de tampones superabsorbentes que permiten la proliferación de bacterias como el Staphylococcus aureus en la vagina.

4. Fragancias y químicos irritantes
Los tampones y toallitas con fragancias contienen una variedad de químicos que pueden causar irritación en tu bulba. La piel y mucosas de la vagina son muy sensibles, y el uso de productos perfumados puede alterar el pH vaginal, provocando infecciones, irritaciones o alergias. Evitar productos con fragancias es clave para mantener un ambiente vaginal saludable.

5. Alternativas más sostenibles: la copa menstrual, las toallitas reutilizables y las bombachas menstruales
Hoy en día hay muchas opciones. La copa menstrual puede durar hasta 10 años, lo que reduce significativamente la cantidad de residuos generados, y las toallitas reutilizables evitan el uso de plásticos y productos químicos, al igual que las bombachas menstruales.

6. El microplástico en los océanos
Cada vez que tirás una toallita o tampón, corres el riesgo de que termine en ríos y mares, contribuyendo a la contaminación por microplásticos. Los residuos de los productos menstruales son responsables de una parte considerable de los desechos que se encuentran en las costas y océanos.

7. Costos a largo plazo
Aunque los tampones y toallitas femeninas parecen ser opciones económicas a corto plazo, a lo largo de los años representan un gasto considerable. Al optar por productos reutilizables no solo estarás ayudando al ambiente, sino que también ahorrarás dinero a largo plazo.

8. Conveniencia y comodidad
Aunque algunas mujeres pueden encontrar los tampones y toallitas más convenientes, las alternativas como la copa menstrual, las bombachas menstruales y las toallitas reutilizables avanzaron mucho en cuanto a comodidad y facilidad de uso. Las copas menstruales, por ejemplo, solo necesitan cambiarse cada 8-12 horas, reduciendo las molestias y el riesgo de que te manches.

9. Productos hipoalergénicos y naturales
El uso prolongado de tampones y toallitas de algodón puede causar irritación, alergias o incluso infecciones debido a los químicos que contienen. Las alternativas reutilizables, como las toallitas de tela, están hechas de materiales naturales e hipoalergénicos que respetan la flora vaginal y reducen el riesgo de reacciones adversas.

10. Contribuir a un futuro más sostenible
Cambiar los tampones y toallitas de algodón por alternativas reutilizables no solo protege tu cuerpo, sino que también marca una diferencia significativa en el ambiente. Desde evitar los químicos tóxicos hasta reducir los desechos plásticos, las opciones sostenibles son el futuro de la higiene menstrual. ¿Te sumás?